Con el nombre de Alianza 2022, los tres gigantes Renault, Nissan y Mitsubishi pretenden dar un golpe de autoridad en cuanto a vehículos eléctricos se refiere. Gracias a las sinergias anuales de la Alianza se pretende llegar a generar 10.000 millones de euros al final del plan, dice Carlos Ghosn, presidente y director general de la Alianza. Asimismo se espera vender un volumen de unidades superior a 14 millones, y una cifra de negocios que rondará los 240 000 millones al final del plan. Sin duda unos objetivos muy ambiciosos que a la vez irán acompañados de interesantes sorpresas para el público.
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¿Y en qué consiste concretamente la Alianza 2022?
Las tres compañías han firmado un acuerdo para el lanzamiento de 12 modelos nuevos de vehículos eléctricos cero emisiones, y asimismo, 40 modelos con distintos niveles de conducción autónoma, todo antes del 2022. Para la misma fecha, se espera que más de 9 millones de vehículos sean ensamblados en cuatro plataformas comunes. Para tener un número de referencia, en 2016 se ensamblaron 2 millones de vehículos en dos plataformas. También se espera que una vez finalizado el plan, las tres partes compartan 22 motores de un total formado por 31. En 2016 eran compartidos 14 motores de un total de 38. Con estas cifras nos podemos hacer una idea de la importante optimización que se llevará a cabo en los procesos de fabricación gracias a esta Alianza 2022.
Como ya se ha mencionado antes, para el final del plan se habrán lanzado 12 automóviles nuevos totalmente eléctricos. Para aquel entonces, se prevé que la autonomía de la conducción llegue a superar los 600 km, y que sea posible llevar a cabo un recorrido de 230 km con tan solo 15 minutos de recarga. Se tratan de números que invitan a pensar de un modo optimista, ya que en el año 2016 por ejemplo, este cuarto de hora de recarga solo podía llegar a proporcionar 90 km de recorrido. Asimismo, el coste de las baterías se espera que sufra una reducción del 30% en comparación el 2016. Si hasta ahora la tecnología eléctrica no resultaba ser una elección del todo factible por los múltiples hándicaps que presenta, en poco tiempo puede que el panorama cambie por completo.
En cuanto a la conducción autónoma, se lanzarán 40 modelos con diferentes niveles de autonomía. En 2018 por ejemplo, el vehículo lanzado con conducción autónoma precisa del control continuo por parte del conductor. Sin embargo, en 2020 solamente se necesitará una vigilancia esporádica del entorno en las autopistas, mientras que ya en 2022 no se requerirá atención por parte del conductor, ya que será lanzado un automóvil completamente autónomo. ¡El futuro está a la vuelta de la esquina!
La Alianza 2022 también recoge una nueva estrategia referente a la oferta de servicios de movilidad, un tema que está muy en auge actualmente. El objetivo de la Alianza es establecerse como uno de los principales líderes del mercado en cuanto a servicios de movilidad a demanda gracias a vehículos robotizados. Además otra de sus metas es la de tener un rol importante como suministrador de vehículos para el carsharing y el transporte colectivo.
El comienzo de la Alianza, cuando Renault compró Nissan
El 27 de marzo de 1999 la firma francesa Renault se hizo con un 36,8% de Nissan, pasando de esta manera a ser su principal accionista. El monto de la operación se situaba en los 5.400 millones de dólares. El nuevo grupo Renault entraba fuerte dentro de un marco donde las alianzas empezaban a ser imprescindibles, situándose de esta manera como el cuarto grupo automovilístico a nivel mundial por detrás de General Motors, Ford y Toyota. Una maniobra más en la que se buscaba aumentar la rentabilidad de ambas empresas y optimizar los procesos de producción, y de esta manera hacer frente a la dura competencia del sector. Eso sí, hay que destacar que Nissan atravesaba ciertos problemas económicos por aquel entonces, lo que le ha empujado en gran parte a buscar un socio financiero.
La Alianza Renault-Nissan no hacía más que empezar su andadura, en la que las sinergias de ambas compañías se fueron maximizado, y se ha conseguido alcanzar una presencia mundial mayor de lo que podrían haber aspirado ambas firmas en solitario. En 2014 por ejemplo, se alcanzaron cifras de ventas de 8,3 millones de vehículos en comparación a los 4,8 millones de 1999. En 2016 se llegaron a comercializar 9,96 millones de unidades, eso sí, incluyendo también a Mitsubishi.
La formación de la Alianza actual, Nissan compra Mitsubishi
A mediados del año 2016, Nissan anunció la compra de un 34 % del capital de Mitsubishi, poco después de que saliera a la luz información sobre esta última que revelaba la manipulación de información referente al consumo de sus minicoches. De esta manera, dos de los grupos automovilísticos de mayor envergadura en el país del sol naciente unieron sus fuerzas, pasando Nissan a ser el principal accionista de la firma. Si bien ambas empresas ya mantenían un acuerdo de participación desde el 2011 para cooperar en la fabricación y desarrollo de los motores, en su momento no se habló de un posible intercambio de acciones.
El terreno se va preparando para lo que promete ser en los próximos años un cambio del paradigma dentro del sector automovilístico, y no es otra que el de la electrificación. Según algunas previsiones, para el año 2021 la producción de baterías a nivel mundial será más del doble, se disminuirá el precio de los coches y las mismas baterías serán más eficientes. Según los analistas de Bloomberg, de cara al año 2030 los coches eléctricos llegarán a ser por vez primera más baratos si la producción de baterías sigue aumentando año tras año. Además no hay que olvidar todas las ventajas que presentará para el medio ambiente este tipo de vehículos con la continua bajada de emisiones de CO2. Al final todos salen ganando.
¿Conoces los automóviles qué pretenden hacerle frente a esta alianza? El nuevo Peugeot 508 es uno de ellos, de modo que no te pierdas el post sobre todas las sorpresas que nos aguarda el lanzamiento de este nuevo vehículo. Los nuevos Seat del 2018 tampoco piensan perder el terreno y vendrán con fuerza para sorprender una vez más.
