Los SUV están de moda. Se trata de una realidad que nadie puede negar. En España uno de cada cuatro coches vendidos es un todoterreno. En un mercado cada vez en un mayor auge, y no es de extrañar que los fabricantes de automóviles cada vez destinen más recursos en perfeccionar su línea de vehículos SUV. Y los que más nos beneficiamos de esta competencia somos nosotros, los usuarios, porque somos testigos de auténticas joyas que nos van sorprendiendo como es el caso del nuevo Peugeot 5008. La firma francesa ha decidido darle un más que completo lavado de cara a este modelo respecto a su antecesor, y como resultado observamos un vehículo de un diseño atrevido y rompedor, que dará mucho de qué hablar.

La renovación estética del nuevo Peugeot 5008

Como si hubiese pasado por un programa televisivo de cambio de look, el nuevo Peugeot 5008 tiene un aspecto totalmente renovado. El nombre es de las pocas cosas que comparte con su antecesor, porque a nivel de diseño nos encontramos ante un coche prácticamente nuevo. El monovolumen se ha transformado en un todoterreno feroz, imponente y elegante. A nivel estético guarda muchas similitudes con sus hermanos menores, el 2008 y el 3008. La carrocería mide 4,64 metros de largo, lo que vienen a ser 19 cm más que en el 3008. En los laterales destacan las líneas rectas que resaltan ese carácter sobrio y robusto. La forma de los faros delanteros simboliza los colmillos de un león, mientras que los faros traseros representan sus garras. De modo que no falta el guiño de la marca hacia el rey de la selva, que viene a ser el símbolo de la compañía. Y al igual que este noble animal, el Peugeot 5008 transmite fuerza, potencia y majestuosidad.

El diseño interior es elegante y vanguardista, parece incluso extraído de un futuro no muy lejano. Tanto los materiales como los acabados son de corte premium, muy sofisticados y de una calidad admirable. Sin duda resulta muy placentero estar al volante de este nuevo 5008, gracias en gran parte al diseño del habitáculo i-Cockpit, que a pesar de tener pocos años (aparecido por primera vez en 2012 en el 208) se está convirtiendo en todo un buque insignia de la marca. Se trata de un novedoso sistema de conducción que presenta una revolucionaria experiencia de manejar el vehículo, diferente a lo que hayamos podido estar acostumbrados. El volante compacto, más pequeño de lo habitual, está pensado para otorgar una mayor capacidad de maniobra al conductor. Se logra de este modo facilitar la conducción e intensificar las sensaciones al desplazarse al volante de este vehículo. Asimismo, el cuadro de instrumentos es digital, con una pantalla de 12,3 pulgadas que se sitúa en una posición más elevada de lo común, de modo que conseguimos visualizarlo por encima del volante.

Sobre la consola central se alza una pantalla multimedia táctil de 8 pulgadas, con una ligera orientación hacia el conductor, que a nivel estético no desvirtúa la simetría interior, pero que facilita en gran medida su uso para el propio conductor. Desde la misma, es posible acceder a casi todas las funciones del coche: navegador, climatizador, multimedia, etc. Debajo de la pantalla nos encontramos con una serie de botones colocados en línea, y que sirven de acceso directo a las funciones principales del vehículo. La estructuración del conjunto de la consola central está diseñada para reducir al máximo las distracciones al volante.

Comodidad para todos

Nos encontramos con un apoyabrazos central que guarda en su interior un remarcable espacio en el que podemos depositar unos cuantos objetos. El salpicadero también tiene un buen tamaño, en el que también tendrán cabida distintos artículos. El espacio en general de la parte delantera cumple con creces, de modo que ni el conductor ni el copiloto pueden presentar quejas en cuanto al confort. El Peugeot 5008 da la posibilidad de configurar los asientos para 5 o 7 plazas, siendo los de la tercera fila opcionales o de serie según el equipamiento seleccionado. Cuando se configura para 5, los pasajeros de la segunda fila disfrutan de un enorme espacio, siendo este mucho más amplio de lo que puedan precisar. Hay también varios huecos donde guardar objetos, una bandeja situada detrás de los asientos delanteros, y una ventilación con regulación específicamente diseñada para estas plazas posteriores. Asimismo, los tres asientos de esta segunda fila disponen de anclaje ISOFIX, que permite un fácil y rápido montaje y desmontaje de sillas infantiles, haciendo de este 5008 un coche muy cómodo para todas aquellas familias que disponen de niños pequeños.

La tercera fila, en caso de una configuración para 7 con una alineación de 2-3-2, cuenta con dos asientos en los que se dispone de bastante espacio para tratarse de las dos últimas plazas. Evidentemente no presentan el mismo nivel de confort que las demás plazas, pero eso es algo que ocurre en todos los vehículos de esta índole, y la verdad que podríamos afirmar que en este 5008 se va más cómodo que en muchos otros modelos con tercera fila. Como detalles que llaman la atención, en uno de los lados nos encontramos con una toma de 12V para cargar el móvil, y en otro de los lados hay un posavasos. Lo más habitual es que los asientos de esta última fila no vayan acompañados de ningún tipo de extra.

Si no se hace uso de la tercera fila de asientos, el maletero ofrece un espacio de 780 litros de capacidad. Se trata de un maletero grande que supera al de sus rivales más directos, como el de SsanYoung Rexton con una capacidad de 680l, y el Skoda Kodiaq de 650l. En este aspecto sin duda el Peugeot 5008 ha querido desmarcarse en su segmento, y de gran manera, de modo que todos aquellos usuarios que precisen de un maletero espacioso para su vida cotidiana, encontrarán en este vehículo a su aliado ideal. En cambio, cuando se utilizan los 7 asientos, el espacio del maletero se reduce drásticamente, algo entendible también, pero aun así resulta posible colocar un silla de niño plegada.

La experiencia de conducir un Peugeot 5008

El nuevo 5008 cuenta actualmente con los siguientes tipos de acabados: Active, Allure , GT Line y GT. Entre los diferentes equipamientos configurables se encuentra la recarga inalámbrica para el móvil, techo Black Diamond, dos cámaras exteriores, climatizador bizona, acceso y arranque manos libres, retrovisores abatibles eléctricamente con luz led de acogida o llantas de 19”. Sin duda todo un abanico de posibilidades para el gusto de cada uno.

En cuanto a la conducción, una vez te pones al volante de este 5008, la sensación de comodidad es máxima. Se conduce de una manera muy fluida, incluso en los tramos con curvas resulta ser un gozo, y eso que estamos hablando de un vehículo de grandes dimensiones. Tanto la dirección como la suspensión responden perfectamente, de modo que en todo momento notas estabilidad. Si lo comparamos con el manejo de un 3008, sí que se puede llegar a apreciar algo más de balanceo, pero es algo entendible teniendo en cuenta que tanto la longitud como el peso resultan ser superiores, y al pasar de monovolumen a SUV, el centro de gravedad de este 5008 está muy elevado, produciéndose un aumento de la distancia libre al suelo de hasta unos 24 cm.

El habitáculo i-Cockpit desde sus inicios tuvo tanto a amantes como detractores de dicha tecnología. Gran parte de las quejas venían precedidas por el hecho de que la instrumentación no se visualizaba bien sobre todo para aquellas personas que fuesen de menor estatura. En el 3008 se han corregido esos aspectos, con un volante 20 milímetros más compacto, pero igualmente cómodo. En este 5008 se ha seguido manteniendo esta tónica, y la adaptación a la conducción resulta ser rápida y cómoda. Al poco tiempo de estar conduciendo nos parecerá que hayamos viajado en un habitáculo de estas características durante toda la vida, y eso que el cuadro de instrumentos se sitúa en una posición poco usual.

Lo que sí se echa en falta es la posibilidad de disfrutar de la tracción a cuatro ruedas. Si bien es cierto que por sus prestaciones responde perfectamente fuera del asfalto, a los más puristas de los todoterrenos quizá se les quede esta pequeña espina clavada. Pero ya os aseguramos que Peugeot ha puesto todo el esmero posible para tapar esta carencia con el “Advanced Grip Control” que se puede instalar opcionalmente. Dicho mando de control permite seleccionar entre diferentes tipos de tracción según las condiciones del terreno (Normal, Nieve, Barro, Arena y ESP Off) así como controlar la velocidad durante tramos de descenso, pudiendo el coche frenar automáticamente al bajar por pendientes pronunciadas a escasa velocidad. La instalación de este sistema va acompañada del montaje de neumáticos M+S, que aportan una buena adherencia en las superficies más resbaladizas.

Motorización del 5008

En cuanto a las motorizaciones, el 5008 gasolina cuenta con las versiones de 1.2 Pure Tech de 131 CV y 1.6 THP de 165 CV. Los motores de gasolina p 1.6 Blue HDi de 100 y 120 CV, y el 2.0 Blue HDi de 150 o 180 CV. Si bien las versiones de menor motorización responden de un modo más que correcto, para un vehículo de estas envergaduras siempre es más aconsejable hacerse con las versiones más avanzadas por tal de exprimir todo su jugo, y sobre todo si tenemos previsto cargar el maletero con mucho peso o conducir por zonas de montaña. Un conductor que tenga por hábito una conducción tranquila sí que tendrá suficiente con los motores más pequeños.

El motor de gasolina responde con soltura, no se le puede achacar ningún pero. En los motores diésel en cambio, que si bien a priori cuentan con mejores prestaciones respecto a los de gasolina, el ruido al arrancar en frío no resulta ser del todo convincente. Al cabo de poco tiempo ese ruido acaba pasando desapercibido, sin embargo, la primera impresión es la que os hemos comentado. Pero ni mucho menos se trata de un factor que repercuta en la conducción o que impida disfrutar plenamente de la experiencia Peugeot 5008.

Conclusiones

Peugeot se ha vuelto a superar tras el gran trabajo realizado con el 3008. Tanto el diseño interior como el exterior están muy bien logrados, siendo un coche muy llamativo a primera vista. La calidad de los materiales y el nivel de acabados no admiten discusión. Sin llegar a ser los de un coche de lujo sí que denotan un carácter premium, sin que por ello el precio del vehículo se dispare excesivamente. Todos los pasajeros del vehículo pueden viajar con total comodidad, destacando sobretodo el gran espacio del que se dispone en la segunda o tercera fila en comparación con otros modelos. Además, estas plazas traseras son totalmente modulables, pudiendo adaptarlas a nuestras necesidades. Las dimensiones del maletero son de las más grandes que hemos podido ver en el segmento, pudiendo llevar una carga notoria en el vehículo.

El habitáculo i-Cockpit parece extraído de una película de ciencia ficción ambientada en el futuro. Al conducirlo por primera vez notaremos la diferencia respecto a otros vehículos debido a como está configurado todo el interior, pero enseguida nos adaptamos a esta innovadora forma de conducción. Son muchos los que ya se han enamorado del i-Cockpit en anteriores vehículos de Peugeot, y con este 5008 creemos que la compañía ha dado un paso más. El vehículo tiene un comportamiento excelente en las curvas, y fuera del asfalto cumple con creces a pesar de no tener tracción 4×4. Se trata del equilibrio perfecto entre la robustez de un todoterreno y la versatilidad de un monovolumen.

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Tabla de precios del nuevo Peugeot 5008